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Bienvenidos a esta parte del bosque donde se puede escuchar al hongo hablar.
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La chica que escuchó hablar al hongo
Monstruo | 25 | Argentina | estudiante
Uso mi memoria para datos inútiles y trato de hacer espacio para lo que van a tomar en los exámenes. Amo leer e intento escribir. Antes dibujaba mucho. Vivo lejos, pero enamorada de las montañas y de
un conejo. Cada tanto me gusta ver videos de osos y de shibas. No me hablen nunca de abejas.
También estoy en
Cosas que sí ♥: escribir, leer, dormir en invierno, latín, escuchar música en viajes largos, stop-motion, geishas, mitología, cartoons, compras
Cosas que no ✘: ship hate, la cyber-policía moral, abejas, maltrato animal, colonización cultural


Te voy a guardar en un caleidoscopio ~
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¿Muerto es mejor? Cementerio de animales y por qué deberíamos leerlo
22 de junio de 2014 | 21:04 |
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Un gato que vuelve de la tumba con olor a mierda, una familia que resulta insoportable pero que termina conmoviendo al lector cuando descubre que a esta le espera una sucesión de desgracias y un anciano que, sin quererlo, predispone todo para que un padre de familia caiga lentamente en la locura.
Esos son los elementos clave de Cementerio de animales, una de las obras de Stephen King que, como muchas otras, llegó a la pantalla grande. Si bien los hechos se van sucediendo de la misma forma, la psicología y reflexión que se da en esta extensa novela es algo que al cine le costó mucho adaptar.
Louis Creed llega con su familia a su nueva casa en Ludlow y entabla en seguida amistad con su vecino, el viejo Jud Crandall.
Jud, que lleva viviendo Ludlow desde siempre, invita a toda la familia a dar una excursión por el sendero que comienza detrás de la casa de los Creed y mostrarles el Cementerio de animales, armado por los niños del pueblo que perdieron sus mascotas. Al regreso, la hija pequeña de Louis queda muy preocupada al pensar que su gato no va a vivir por siempre; presionado por su esposa, Louis le asegura que al gato le quedan muchos años por vivir.
Sin embargo, cuando el gato muere en un accidente, Louis es guiado por Jud a un lugar más allá del Cementerio de animales, un lugar que promete el regreso de los que han fallecido, aunque no vuelven precisamente de la misma forma.
Cementerio de animales es una novela fascinante sobre la muerte vista a través de los ojos de varios personajes: la hija pequeña de Louis, su esposa, Jud y el propio Louis.
Las relaciones familiares y de amistad se muestran con mucho realismo, distando de la imagen perfecta que suele verse en varias películas. Cada vínculo está bien armado y narrado y eso nos va a sensibilizar para la tragedia que se avecina sobre la vida de Louis y sus seres queridos.
Claro que las pinceladas de lo sobrenatural hacen que esto vaya más allá de un par de reflexiones acerca de la vida. El Cementerio de animales es un lugar extraño y el cementerio que hay más allá es aterrador desde el comienzo del camino. Stephen King nos describe escenarios con detalles que me dieron escalofríos.
Aunque el comienzo me resultó algo monótono, a partir de la muerte del gato de la nena, las cosas comienzan a marchar como una montaña rusa que desciende a toda velocidad. La presentación de los personajes, sus caracterizaciones (mención especial a Jud, que es uno de mis personajes favoritos), sus recuerdos intercalados con pensamientos y diálogos, le dan movimiento a todo el relato y nos colocan en diferentes pieles que nos permiten comprenderlos y aprobar o no sus acciones.
¿Qué haríamos en su lugar? ¿Realmente vale la pena desafiar las leyes naturales?
"A veces es preferible la muerte", dice Jud Crandall en un momento.
Es hora de que ustedes respondan si es cierto o no.
Etiquetas: el verbo leer